Paz

A menudo venerada y a veces subestimada, la paz es la piedra angular de la existencia humana. Abarca casi cualquier situación o relación, desde la personal hasta la internacional. La paz denota armonía, tranquilidad, seguridad y ausencia de violencia dondequiera que se aplique.

 

Paz Internacional

 

La paz internacional es una "situación en la que no existe lucha armada" y caracteriza generalmente la mayoría de las interacciones entre naciones. Considera la relación entre México y Estados Unidos, por ejemplo. Su interacción es armoniosa y tranquila sin conflicto armado directo. 

 

La paz también incluye la seguridad o "ausencia de peligro". Incluso en ausencia de guerra, la presencia o amenaza de peligro perturba la paz y la seguridad. En la actualidad, Guyana no tiene seguridad ni paz en este sentido después de que Venezuela amenazara con apoderarse de parte de su territorio. La amenaza de guerra seguirá planeando sobre Guyana incluso sin que haya combates activos. 

 

A pesar de los desafíos, la paz internacional sigue siendo muy deseable y representa un acuerdo de seguridad armonioso y mutuamente beneficioso. La armonía, componente fundacional de la paz, describe una situación "cuando las cosas parecen estar bien o convenir juntas", mientras que la seguridad implica "protección" frente a "ataques de países extranjeros". Juntas, la seguridad y la armonía promueven una situación en la que la no violencia es mutuamente beneficiosa. 

 

Por desgracia, los políticos suelen manipular el concepto de paz para justificar la guerra y los actos de violencia. Por ejemplo, todas las partes implicadas en la escalada de conflictos en Oriente Medio justifican sus acciones como necesarias para alcanzar la paz. Sin embargo, tales afirmaciones son contradictorias en sí mismas, ya que la paz es "liberarse de la guerra y la violencia".

 

Paz Nacional

 

En el ámbito doméstico, la paz significa la ausencia de lucha armada "en un país". Una guerra civil representa un extremo, aunque guerras civiles como las actuales en Siria y Yemen frecuentemente se convierten en contiendas internacionales. Sin embargo, la paz nacional va más allá de la mera ausencia de violencia para abarcar la "ausencia de disturbios civiles", ya que los disturbios civiles perturban la armonía social. 

 

Los disturbios civiles, como el boicot a los autobuses de Montgomery, son más síntomas que perturbadores de la paz. Este boicot de 381 días perturbó a toda la comunidad y acabó desembocando en violencia, incluido el bombardeo de la casa del organizador del boicot, el Dr. Martin Luther King Jr. "Los que participamos en la acción directa no violenta no somos los creadores de la tensión", escribió el reverendo King. "Simplemente sacamos a la superficie la tensión oculta que ya está viva. La sacamos a la luz, donde puede ser vista y tratada". 

 

Al igual que la paz internacional, la paz doméstica es deseable universalmente. La paz y la armonía motivaron al Dr. King a perseguir una sociedad más armoniosa a través de la protesta, pero la paz también motivó a sus adversarios, que trataron de sofocar las protestas. Al igual que los políticos pueden abusar de la paz para justificar la guerra, las autoridades a veces se apropian indebidamente de la paz para justificar medidas represivas violentas, mientras que los manifestantes malinterpretan la paz para justificar enfrentamientos violentos.
 

Paz Situacional

 

La paz puede aplicarse a cualquier situación e interpretarse en función del contexto. Por ejemplo, la paz internacional se centra en la situación y la relación entre naciones. España puede experimentar la paz internacional sin una guerra activa, pero los disturbios civiles en Cataluña han perturbado la paz nacional de otras maneras.

 

La paz también puede aplicarse a una situación o momento para describir la "ausencia de ruido o ajetreo en un lugar o en un momento". Lugares como bibliotecas y cementerios suelen ser considerados pacíficos en este sentido. La paz situacional también describe la tranquilidad o un estado "libre de perturbaciones", como la calma que se siente entre el canto de los pájaros.

 

La paz situacional mantiene su significado y función cuando se aplica global o localmente. La paz mundial, por ejemplo, puede considerarse paz situacional aplicada en todo el mundo. Sin embargo, la paz situacional difiere de la paz internacional y nacional en que la paz situacional sólo es deseable en contextos específicos. Entornos como los partidos de hockey o las obras de construcción no suelen asociarse con la paz, pero sirven eficazmente a sus respectivos propósitos.

 

Paz Interpersonal

 

La paz interpersonal se extiende más allá de situaciones específicas, describiendo una "relación de armonía entre las personas". Las relaciones pacíficas son equilibradas, seguras y mutuamente adecuadas. La paz interpersonal puede manifestarse en diversos grados. Por ejemplo, la paz puede describir igualmente a dos vecinos que nunca intercambian más que un saludo y a otros dos que hablan todos los días.

 

Independientemente de su naturaleza, las relaciones pacíficas suelen contribuir a la paz en contextos más amplios. Las relaciones armoniosas entre líderes mundiales tienen más probabilidades de fomentar la paz internacional que las relaciones hostiles, del mismo modo que una pareja armoniosa está mejor preparada que una pareja pendenciera para mantener un hogar tranquilo. Las relaciones enconadas suelen desembocar en conflictos más amplios, pero cultivar la paz en otros sentidos también puede ayudar a mantener relaciones difíciles. 

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Paz Interior

 

La paz interpersonal y la cognición práctica dependen en última instancia de un sentido más específico de paz interior o paz mental. En este sentido, la paz es " la libertad de pensamientos o emociones inquietantes u opresivas". Los pensamientos perturbadores pueden desencadenar miedo y ansiedad, perturbando la seguridad mental, la tranquilidad y la paz. La paz emocional implica gestionar eficazmente los conflictos internos, mantener el equilibrio emocional y superar con elegancia los desafíos mentales. 

 

Los individuos que no pueden encontrar el equilibrio emocional y la seguridad mental sufrirán constantemente de miedo y ansiedad, lo que les impedirá establecer relaciones efectivas. Sin paz interior, es imposible encontrar la paz interpersonal, y sin relaciones eficaces, las comunidades pronto se vuelven disfuncionales. Por ejemplo, el expresidente Donald Trump frecuentemente expresaba miedo, ansiedad y carecía de paz interior. Su discordia tensó las relaciones más críticas de Estados Unidos tanto a nivel nacional como internacional y provocó varios disturbios mortales. 

 

La falta de paz en un sentido nunca es justificación para violar la paz en otro. Sin embargo, fomentar la paz interior puede conducir a la paz interpersonal y a unas relaciones más sólidas. La paz prospera cuando los vínculos y las relaciones pueden aguantar desacuerdos y conflictos. Mientras que la paz se perpetúa a sí misma, la paz interior inicia esta secuencia. Cuando más personas encuentren la paz interior, las relaciones humanas serán naturalmente más armoniosas y prevalecerá la paz mundial.